La Nueva Tierra, una vida en 5D

Belen Gamaleri
Nov 25, 2021
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El Consejo Arcturiano de la 9D me transmite hoy información sobre lo que llamamos la Nueva Tierra. Esta vez, la sabiduría llega a través de una historia, simbólica pero clara para fines de comprehensión global.

“Cada ser co-crea su realidad según su nivel de consciencia. Escucha a tu corazón y elige la realidad más elevada posible a cada instante.”

Historia canalizada del árbol

Érase una vez un joven árbol que se encontraba solo en un planeta. Sus hojas caían. El tiempo pasaba, la nada existía en el Universo. El árbol sentía que no había nada muy interesante en su vida. Sin embargo, él tenía sueños y deseos. Soñaba con visitar otros planetas o embarcarse en aventuras más allá de su lugar de origen.

Sabía que debía haber algo más, una Nueva Tierra. La vida no podía ser sólo existir y vivir cada día la misma historia.

Un día, un ser de luz de otra galaxia vino a visitarlo. Tenía la apariencia de un hada y una energía muy suave y femenina. De tamaño, era mucho más pequeña que el árbol. Vibraba a una frecuencia muy elevada, su cuerpo era raro, como si no se pudiera ver bien, o si? Algo inmaterial, el árbol había remarcado.

Este ser le preguntó por qué se encontraba tan triste y cansado.

A lo que el árbol respondió: “Debido a mis raíces, no puedo transportarme como tú lo haces. Intenté de todas mis fuerzas moverme, salir y explorar el Universo. Pero no lo he logrado. Estoy cansado de estar aquí. Cada día se parece al siguiente y al anterior.”

El ser de luz le preguntó entonces educadamente si podía darle un consejo. El árbol aceptó de agrado.

Le dijo entonces: “Tú buscas mover tu cuerpo, te agitas y te frustras. Mover la materia te resulta más trabajoso que mover tus cuerpos sutiles. ¿Por qué no pruebas, calmando tu espíritu, centrándote y cerrando tus ojos? Concéntrate en tu Alma y pídele aventuras, Pídele que te muestre un mundo como tú quieres. Inténtalo hoy. Yo volveré mañana a ver cómo te ha ido.”

El ser de luz desapareció en una milésima de segundo y el joven árbol se sintió confundido. “Ojalá yo pudiera hacer eso”- pensaba. Intentó por unas horas calmarse, pero cada vez sus pensamientos se alborotaban más. Era más fácil decirlo que hacerlo, pennsaba. Cuando cerraba los ojos, solo pensaba en sus miedos o frustraciones, no podía ver nada de lo que amaba. Después de mucho intentar y al cabo de unas horas, el árbol se quedó dormido.

Y fue justo ahí, cuando su mente decidió descansar, que su Alma pudo manifestar todo lo que venía deseando. En una especie de sueño, comenzó a visitar otros mundos, llenos de seres evolucionados e incluso mágicos. Todos eran amorosos e inteligentes, y la mayoría no tenía un cuerpo físico como él. Era como si pudiera ver sus almas!

El árbol, ahora que se daba cuenta, también estaba visitándolos con un cuerpo sutil. En ese lugar, no existían el espacio y el tiempo: Todo era infinito. Estaba maravillado de la organización y sincronicidad de ese mundo…

A lo lejos, creyó a ver al hada de esa mañana, sonriendo. Pero un segundo después, el árbol se sobresaltó y se despertó.

Disgustado de haberse ido de aquel hermoso y pacífico lugar, al abrir sus ojos, el árbol piensa que sólo fue un sueño. Y su mente intenta una vez más convencerlo que éso no era real. Hasta que recuerda, que el día anterior, el ser de luz había venido a visitarlo, cuando él estaba “despierto”.

Su visita se parecía más a un sueño, y él ya no sabía que era real y que no…

Se queda un momento en silencio, tratando de descifrar, calmadamente.

Su mente se relaja finalmente esta vez y siente un mensaje llegar: “La diferenciación real/irreal no existe en las dimensiones más elevadas de frecuencia. Todo existe ya. Todas las realidades, no sólo son posibles sino que todas coexisten. Cada ser co-crea su realidad según su nivel de consciencia. Escucha a tu corazón y elige la realidad más elevada posible a cada instante. El Universo que visitaste anoche puede ser tu realidad cada día, si tú decides. Sólo cree en él y en tu corazón. Nosotros te enviaremos señales y mensajes para que siempre sepas cuál es el camino más elevado. Siéntelas en tu corazón.”

El árbol, nunca más volvió a sentir lo que sentía antes. Su realidad había cambiado por completo. Cada día sentía la aventura correr por sus venas. Y si algún día no llegaba sola, él ahora sabía cómo conectarse, calmar su espíritu y buscarla con su alma. Cada vez fue más fácil y fue descubriendo que la Nueva Tierra, no existe en el exterior sino en el interior, y que corresponde con un estado de consciencia y una frecuencia elevada y no con un lugar físico. Pero que es igual de real que lo que él conocía hasta ese entonces.

Qué es la nueva Tierra entonces?

Este cuento canalizado, nos hace reflexionar sobre el trabajo interno que debemos hacer para encontrar la felicidad y vivir en un mundo mejor. Si continuamos a culpar a los demás o a todo lo externo, en lugar de responsabilizarnos a nosotros mismos, la satisfacción no llegará. Como experimentó el árbol, la aventura, la alegría, la plenitud y el amor, se construyen desde el interior. Una vez que logramos aumentar nuestra frecuencia, empezamos a manifestar una realidad más elevada en nuestra vida.

“La Nueva Tierra, no existe en el exterior sino en el interior, y corresponde con un estado de consciencia y una frecuencia elevada y no con un lugar físico."

La Nueva Tierra ya está aquí, dentro tuyo y dentro mío. Dentro del corazón de todos. Es la máxima expresión de lo que ames. Todos tenemos la capacidad de manifestar una realidad mejor, pero no va a llegar sola. Tenemos que tomar consciencia y además enseñar a las generaciones que vienen cómo funciona. El cambio está llegando, el Gran Despertar de consciencia ya está entre nosotros.

Elige la Nueva Tierra conscientemente, y tú y todos beneficiaremos de ella más rápido y mejor.